Productividad es la capacidad de hacer más con menos, es así de simple desde su definición, pero muchas veces alcanzarla nos puede parecer todo un reto.
Hay muchas formas de mejorar la productividad en los negocios, pero aquí nos vamos a concentrar solo en uno de los factores críticos para mejorarla o para sepultarla, el talento humano; nuestro activo más valioso.
Cuando entendemos que las personas que trabajan para mi empresa, son el factor diferenciador que ningún otro competidor podrá copiar jamás y decidimos invertir en ellas de manera consistente, buscando su desarrollo, no solo profesional sino también el crecimiento personal; cuando las valoramos por lo que son, por lo que representan y por lo que están dispuestas a hacer por mi negocio, es cuando realmente ocurre la magia.
Hoy tener colaboradores que tengan la camiseta puesta, que compartan y vibren con el propósito de mi compañía, que estén comprometidos a darla toda por alcanzar las metas que nos trazamos cada mes y cada año es todo un lujo; pero la buena noticia es que esto no es imposible de lograr.
Vivir y trabajar en equilibrio
Tener empleados felices hoy en las organizaciones es perfectamente viable, si como empresa está entre nuestra lista de prioridades. Para esto debemos empezar por crear una cultura que busque fomentar buenos hábitos de vida, por incentivar el cuidado de la salud de todos como principio fundamental, por poner límites sanos y cuidar la manera de relacionarnos entre todos.
Es así, como logramos alcanzar una productividad sostenible, si cada persona que trabaja en mi empresa, la siente como propia, celebra cada victoria y le duele cada que algo no sale como se esperaba, cuando viven convencidos que como seres humanos son valorados, queridos, respetados, que su familia es importante y que solo juntos somos capaces de vencer todos los obstáculos y triunfar.
Te invito pues, a que pienses cómo quieres que tu empresa sea reconocida, cuáles son esas palancas que deseas mover para mejorar la productividad de manera sostenible y consistente y si estás dispuesto a invertir un poco en lo más valioso que tienes, para crecer y diferenciarte, ¡está en tus manos!
